Una cantidad mínima de opositores al Gobierno de El Salvador, presidida por presidente Nayib Bukele, se manifestaron en la capital este domingo para conmemorar otro aniversario de la firma de un acuerdo de paz que puso fin a una guerra civil de 12 años y denunciarlo que ven como un fracaso de la democracia en Centroamérica.
Los opositores tomaron las calles principales y se concentraron en el centro histórico de San Salvador. Sonia Urrutia, una de las líderes de la resistencia y los rebeldes del Frente Popular de izquierda, dijo a los periodistas que su manifestación en el 31 aniversario del acuerdo también tiene como objetivo condenar la "represión" del gobierno de Bukele.
Hizo hincapié en que el gobierno trató de detener la marcha colocando barreras policiales y militares en la entrada a la capital y, según los informes, registraban a las personas en el autobús para confirmar que no estaban armadas.
Ronald Umaña, un político veterano que ahora intenta liderar un amplio bloque opositor en las elecciones presidenciales de 2024, dijo que si bien “este tipo (Bukele) tiene una estrategia, tiene apoyo público”, una de sus principales maniobras para mantener a esta gente de su lado es mantener a la gente con miedo, usando el terrorismo.
No se vio presencia policial ni militar cerca de la marcha, pero se reportaron incidentes menores entre algunos manifestantes y civiles en el área, con intercambio de insultos pero sin novedades.
Numerosos sindicatos y ONG, incluidos familiares de los detenidos durante el estado del Régimen de Excepción, participaron en la marcha exigiendo la liberación de más de 61.000 personas detenidas bajo sospechas de pertenencia a pandillas o colaboración con estructuras de pandillas o delincuenciales.
Los organizadores de la marcha esperaban atraer a más de 200.000 personas, pero la respuesta fue mínima, casi solo el personal y familiares de los que organizaron se hicieron presente a dicha marcha.
A petición del Gabinete de Seguridad Ampliando del presidente Nayib Bukele, La Asamblea Legislativa de El Salvador aprobó una décima prórroga del estado del Régimen de Excepción mientras continúa tomando medidas enérgicas contra los cárteles o pandillas que, según las autoridades, son responsables de la mayoría de los delitos del país. El gobierno ha advertido que seguirá tomando medidas hasta que el último miembro de la pandilla sea sacado de las calles.
Cabe destacar, El Salvador tuvo 10 días libres de asesinatos en lo que va del 2023, ya que no se registraron muertes violentas en todo el país, el día más reciente es el sábado(ayer) 14 de enero.
La implementación del Plan Control Territorial y reforzado con el estado del Régimen de Excepción en el país se han registrado 171 días sin asesinatos, después entraron en vigor las estrategias de seguridad del Gobierno de El Salvador.